En la entrada al golfo de Guayaquil y frente a la isla Puná se encuentra esta pequeña isla, donde sus principales habitantes son miles de aves marinas, razón principal de su declaratoria como refugio de vida silvestre. En ella, fragatas, piqueros patas azules y pelicanos encuentran sitios para comer, descansar, cortejar y anidar. El área protegida incluye la isla Santa Clara, los islotes aledaños y dos millas náuticas a su alrededor. La isla e islotes están interconectados por una plataforma sobre la cual se puede caminar en marea baja. La abundancia de nutrientes de sus aguas es la explicación para la gran productividad marina que se ha reportado: una de las más altas de la costa continental del Ecuador y donde confluyen un sinnúmero de especies, muchas de interés comercial.
Desde Guayaquil: Para ingresar a esta área se sigue por la vía a Machala (186 km). En esta ciudad se debe dirigir al muelle de Puerto Bolívar (7 km), para tomar una embarcación. Las embarcaciones demoran dos horas hasta la isla.